Segunda División

Nelson y Nancy, una pareja hondureña unida gracias al arbitraje

Esta pareja de silbantes se conocieron a través del balompié y hoy conforman una hermosa familia.

2018-02-14

Hoy se celebra el Día del Amor y la Amistad. En el fútbol hondureño hay muchas historias de amor, pero una de las que destaca es la de los árbitros Nancy y Nelson Mejía. Ellos se conocieron a través de esta profesión y hoy disfrutan de un hermoso matrimonio.

Ambos nos contaron cómo se conocieron. “Nos conocimos siempre en el arbitraje, yo (Nelson) estaba pitando una cuadrangular de mujeres en la aldea que yo vivo y llegó un equipo de donde ella residía y desde la primera vez que nos vimos nos flechamos, cada vez que la tocaban y la miraban mal yo pitaba falta. Luego anduvimos alrededor de siete meses de novios, después ella salió embarazada. En esa etapa del noviazgo a la mamá de Nancy por asaltarla la mataron y la única opción era que se quedara con la hermana, pero solamente los dos sabíamos que estaba embarazada así que decidimos que se viniera a vivir conmigo”.

Nelson recordó que al inicio tuvo algunos disgustos con su pareja porque ella no entendía todo lo que le tocaba hacer como árbitro. “Yo subí a la categoría de reservas y me tocaba ir a muchas charlas y eventos de preparación de árbitros, tenía que quedarme de un día para otro con el profesor Amílcar Burgos que siempre nos ha apoyado. Ella no entendía eso y cuando yo llegaba a casa me decía que a saber dónde era que andaba, entonces le dije vamos un día para que te hagas árbitro, incluso después de los entrenos me reclamaba por qué llegaba tarde. La invité un día para que fuera a entrenar toda la semana y resulta que hubo un partido amistoso y un juez de los ya experimentados José Sandoval no llegó; entonces, le dije a ella, agarre una bandera y póngase, de forma improvisada la puse y no le gustó mucho, pero al final del partido le pagaron y eso ya le encantó”.

Foto: Diez

La pareja tienen 12 años de estar juntos y dos hijos, David de 11 años y Nahomy de 6.



Nancy comenzó a apasionarse por el arbitraje al igual que su esposo y decidió probarse. “Empezó a entrenar y entendió por qué yo llegaba tarde. Las primeras veces que a ella la convocaron se iba por dos o tres días y luego venía diciendo que ahora sí entendía todo. Desde ese momento la relación empezó a caminar mejor”.

La pareja de silbantes expresó lo que planifican previo a salir a dirigir un juego. “Antes de un partido siempre planificamos, si a ella le toca ir a otro lado yo me voy a dejarla, si no, ella se va con los otros árbitros. En la casa lo que se habla es, primero cuidarnos nuestra integridad física, todas las semanas desde que llega el jueves sabemos que no debemos fallar en ese aspecto de cuidarnos como esposos. Y más que todo antes de salir de casa lo que hacemos es orar, ponernos en las manos de Dios, gracias a él que nos ha puesto dos personas fundamentales en nuestras vidas que son el exjugador y ahora pastor Derick Hulse y su esposa, Luisa Hulse, ellos han sido dos personas claves para nosotros y siempre están orando y apoyándonos en lo que necesitemos”.

El juez central reconoció que su esposa lo ha ayudado para saber diferenciar el arbitraje y su rol en casa. “Nancy me ha ayudado mucho, antes yo era un ogro dentro y fuera del campo y al llegar a casa me costaba quitarme el chip y ella me decía tenés que diferenciar lo que es un partido y lo que es estar afuera de él, porque si vas a venir aquí así mejor ni vengas. A pesar de todo la del carácter fuerte es ella, la que siempre está para darme un consejo”.

Foto: Diez

Nancy ya recibió su acreditación como árbitro FIFA.


Además, agradecieron a las personas que los han apoyado a nivel del arbitraje. “Quienes han sido parte de que estemos en esta carrera han sido el profesor José Sandoval, Armando Castro y Shirley Perelló en Cortés y quien nos abrió la puerta en segunda división y a nivel nacional fue el profesor Alirio Hernández, Amílcar Burgos y Benigno Pineda, estamos muy agradecidos con ellos”.

La pareja recordó una de las tantas anécdotas que han vivido en el arbitraje. 'Una vez estaba en un partido en la Pradera, jugaba Parrillas One contra Brasilia y yo estaba sentado afuera del camerino y un tipo que estaba pegado al alambre dijo, esa 'lineman' está hermosa verdad alero y yo solo le dije, si está bonita, si la hago mi esposa. En otra ocasión en un partido de Liga Mayor un muchacho se me acercó y me dice Profe me puede conseguir el número de la muchacha que va ahí en la banda y le dije si ya te lo doy pero tene cuidado porque es casada y el marido como que es luchador y al final del partido fue a darme la mano bien apenado y me dijo, Profe perdoneme no sabía que era su esposa no me vaya a expulsar', contaron entre risas.

Es admirable los años que ambos llevan juntos en esta profesión y es una historia que vale la pena reconocerla.