Desde los 10 años está solamente con su madre y desde entonces lucha por su sueño de futbolista.
Está a punto de convertirse en bimundialista con Honduras pues estuvo con la sub-17 en Chile y ahora estará en Corea del Sur con la Sub-20. Tras su actuación en Costa Rica ha recibido una invitación para ser observado por el Liverpool de Inglaterra.
Una vida de carencias comienza a encontrar recompensa. Wesly Decas quiere honrar el esfuerzo de su madre y también hace una gran confesión sobre acerca de su progenitor. Este oriundo de la colonia Felipe Zelaya tiene una historia de grandes sacrificios detrás de él.
¿Cómo te sentís?
Me siento muy contento porque esta noticia no la esperaba. Gracias a Dios que me da esta oportunidad de ir a hacer una prueba en Europa.
¿Qué tanto sacrificio has hecho para lograr la oportunidad?
Me he esforzado al máximo para conseguirla y ya se hizo. Ahora a trabajar fuerte.
¿Dónde vivís?
Vivo en el sector Rivera Hernández, en la Felipe Zelaya.
¿Cómo ha sido esa vida en ese sector?
Uno tiene que estar muy atento. Ha sido complicado.
¿Cómo llegaste a esta Academia?
A mí me vio un señor llamado Léster, quien me llevó a Astros (equipo de ligas menores) y después me trajo a Pumas. Así comenzó mi carrera deportiva. Estuve en la Sub-15, sub-17 y ahora en Sub-20.
¿Tu niñez cómo fue?
Me crecí con mi madre. No estoy viviendo con mi padre. Está preso, aunque siempre lo voy a ver. Él me dice que está orgulloso de mí. Que siga adelante y que no me detenga por mi sueño en el fútbol y tengo que conseguirlo.
¿Desde cuándo está en prisión tu padre?
Yo tenía 10 años. Estaba muy pequeño.
Ha sido muy difícil para vos.
Muy difícil no estar con él. Siempre lo extraño mucho. Un día voy ir a verlo otra vez.
Sí, ella siempre se ha esforzado al máximo siempre ha querido que sus hijos no pasen hambre. Siempre está trabajando. Estoy orgulloso de ella. Quiero que esté feliz y comprarle una casa si sale esa oportunidad.
Tu sueño es ayudarle a tu mamá...
Es mi sueño, que ella esté tranquila y que me voy a encargar de todo. Será mi sueño siempre.
Te tenés que ir rajar el pecho....
Sí, me tengo que ir rajar el pecho. No relajarme en ningún momento y demostrar la capacidad que Dios me dio.
Y si fallas pueden venir otras oportunidades.
Sabemos que puedo fallar, pero no me voy a rendir y siempre voy a seguir para adelante.
¿Qué pasó que no encontrarte oportunidad en equipos hondureños?
No sé. Los equipos no sé qué quieren. Deseaba quedarme en Motagua, no me dijeron nada, pero al siguiente día me fueron a traer. No sé qué pasó.