El futbolista del León, Kévin Álvarez, insultó con fuertes palabras al zaguero de los azules, Henry Figueroa. 'Marihuanero, marihuanero hijo de p...', fue lo que gritó el lateral al defensor frente a la cara de Héctor Vargas.
Los jugadores del Ciclón catalogaron el altercado como algo natural en los clásicos, en especial cuando se juega el pase a la gran final, sin embargo hubo quien no dudó en calificar a los rivales como 'jugadores muy finos' y 'malos perdedores'.
Wilmer Crisanto fue contundente y acusó a los blancos de no asimilar bien la derrota. 'Nosotros sabemos que son un poco fríos, no les gusta que les peguen, son jugadores muy finos. Yo solo puedo pensar que ellos son malos perdedores y no les gusta que uno los toque', disparó.
'Hemos encontrado la medicina para derrotar a Olimpia, corriendo más que ellos y metiendo más que ellos. Estamos acostumbrados a que nunca se nos de el voto de confianza, siempre hay un 'pero'. Ahora Motagua siempre va a lograr cosas grandes por su ímpetu de correrlas todas; no va a cambiar por lo que ellos digan'.
Por último el lateral derecho dice que lo que ocurre en el campo se queda allí y ve a su equipo avanzando el domingo.
'Todo eso queda atrás y lo que cuenta es lo que se hace dentro del campo. Motagua va a llegar a la final', concluyó.
