High On Life: el juego del cocreador de ‘Rick y Morty’ llegó hoy a Xbox Game Pass, con críticas negativas
Ni siquiera la comedia inyectada por uno de los escritores de las series más exitosas de la actualidad pudo mejorar el título.
Quizás no sea uno de los juegos más anticipados del año, pero sin duda High On Life había acrecentado algo de expectativa a medida que más tráileres se iban liberando. El humor absurdo por parte de Justin Roiland, uno de los creadores la exitosa serie animada para adultos Rick y Morty, se podía respirar en cada video del juego, el cual por fin ha llegado a Xbox One, Xbox Series X|S y PC.
Desarrollado por Squanch Games, el juego sigue al personaje principal, un tipo que acaba de graduarse y no tiene ningún tipo de ambición, pero cuando un cartel alienígena invade la Tierra, no le queda más remedio que convertirse en cazarrecompensas espacial. Armado con un arsenal de armas que hablan, son sarcásticas y no paran de escupir chistes, así empieza la aventura.
Cada una de las armas que podemos usar en High On Life tiene un funcionamiento y una personalidad única. Kenny, la primera arma que nos encontramos, tiene la voz del propio Justin Roiland, que también da voz al personaje de Morty, en Rick y Morty, por lo que para los fans de la serie la interacción con esta arma probablemente será una fuente inagotable de carcajadas.
Es un juego de disparos en primera persona, en el que podremos explorar varios planetas en busca de nuestras presas, pues como ya fue mencionado, actuamos como cazarrecompensas. High On Life ya se encuentra disponible para las plataformas de Xbox One, Xbox Series X|S y PC, y para los suscriptores de Game Pass, el título se puede descargar sin costo alguno.
El agregador de reseñas Metacritic ya muestra las notas promediadas del juego, con una abismal diferencia entre las versiones de PC y Xbox Series X|S. Para la versión de PC, el juego cuenta con una nota de 72, que resulta bastante mixta, no tan positiva como cabría esperar. Pero la versión de Xbox Series X|S ha sido golpeada por la crítica, con una nota promedio de 59, bastante por debajo de su otra versión.
“Cualquiera que no esté encantado con la idea de tener a Roiland parloteando constantemente en su oído durante una docena de horas seguidas probablemente encontrará molesta la incesante necesidad del juego de forzarse a sí mismo en el jugador. Con el añadido de un combate poco convincente, una exploración frustrante y la falta de algo más que ofrecer a los jugadores, High On Life es una de las experiencias más molestas, derivadas y pesadas de los últimos años”, comentó el sitio But Why Tho?, que le dio una nota de 3/10.
