El centrocampista de la Fiorentina, Edoardo Bove, se encuentra actualmente en coma inducido después de desmayarse en el campo durante el partido de la Serie A de su equipo en casa contra el de Milán hoy, el cual fue suspendido poco después.
Los compañeros de equipo de Bove solicitaron inmediatamente asistencia médica, y ambos conjuntos de jugadores rodearon al joven de 22 años mientras era atendido antes de ser trasladado rápidamente en camilla a una ambulancia cerca del campo y llevado al Hospital Careggi en Florencia.
El club y el Hospital Universitario Careggi afirmaron: “Edoardo Bove se encuentra actualmente bajo sedación farmacológica y hospitalizado en la unidad de cuidados intensivos”. El comunicado continuó: “Las pruebas cardíacas y neurológicas iniciales descartaron cualquier lesión aguda en el sistema nervioso central y en el sistema cardiorrespiratorio”.
COMUNICADO DEL CLUB
“Fiorentina y el Hospital Universitario Careggi comunican que el futbolista Edoardo Bove, asistido en el terreno de juego tras perder el conocimiento durante el partido Fiorentina-Inter, se encuentra actualmente bajo sedación farmacológica y hospitalizado en cuidados intensivos”, informó Fiorentina en un comunicado.
“Bove llegó hemodinámicamente estable a urgencias y las primeras pruebas cardiológicas y neurológicas realizadas descartaron daños agudos en el sistema nervioso central y el sistema cardiorrespiratorio. Será reevaluado en las próximas 24 horas”, añadió.
Aunque en terapia intensiva y bajo sedación, el jugador consiguió salir con la ayuda de las asistencias de la parada cardiorrespiratoria y su estado mejoró notablemente desde su pérdida de conocimiento en el Estadio Artemio Franchi.
Una vez consciente, acudieron a la habitación para estar con él tanto su padre como el entrenador del equipo, Raffaele Palladino, y la alcaldesa de Florencia, Sara Funaro.
Además, llegaron al centro médico los capitanes de Fiorentina Cristiano Biraghi y Lucas Martinez Quarta.
Sky Italia informó que el jugador recuperó la conciencia mientras estaba en la ambulancia y pudo respirar por sí mismo.
Los padres de Bove y su novia llegaron al hospital junto al entrenador de la Fiorentina, Raffaele Palladino, la mayoría de sus compañeros de equipo, funcionarios del club y el alcalde de la ciudad.