'Increíble ganar un segundo Grand Slam en un año', dijo Kerber. 'Es el mejor año de mi carrera'.
Es la segunda corona Majors de Kerber en la temporada, luego de su victoria en el Abierto de Australia, lo que unido a la derrota de Serena Williams en semifinales de este US Open, la coronarán el lunes como la nueva número uno mundial.
'Ser la número uno y ganar títulos de Grand Slam siempre fue mi sueño desde que era una niña. Significa mucho', dijo Kerber.
La alemana, de 28 años de edad, accedió a su primera final en las canchas neoyorquinas tras derrotar en semifinales del jueves a la danesa Caroline Wozniacki.
De su lado Pliskova, que también jugó su primera final de un Grand Slam, dejó en el camino de semis a la exnúmero uno mundial Serena Williams.
Kerber impuso su mayor experiencia en este tipo de finales para salvar momentos engorrosos, como cuando la checa, décima sembrada, se adelantó 3-1 en el último set, luego de quebrarla.
La germana mantuvo la calma y fue llevando el partido a su terreno con tiros a las dos bandas, que obligaron a Pliskova desplazarse con sus largas extremidades (1.86 de estatura), fallando varias veces en el retorno.
Muestra de lo acertado de la estrategia de la alemana es que su rival cometió 47 errores no forzados, por sólo 17 Kerber, lo que en parte compensó la mayor agresividad de Pliskova, que colocó 40 tiros ganadores por 21 la alemana.
Cuando el último revés de derecha de Pliskova se fue de largo por el fondo, Kerber se tiró de espaldas en la cancha, y luego subió a las gradas a abrazarse con su entrenador y familiares.